Una
vez terminó de extraer néctar del cáliz de la flor que aparece
en la toma, retrocedió, se elevó en el aire para tomar la posición
correcta e iniciar el vuelo hasta posarse en otro cáliz.
Era como si este Episyrphus balteatus concreto, hubiese desarrollado una técnica específica para alimentarse, extraía néctar únicamente de los cálices sin flor..
Secuencia
capturada en este gran arbusto de jazmín amarillo sito en el parque
de María Luisa de Sevilla.